ERC desafía la Constitución y no iza en sus consejerías la bandera española
En las sedes comandadas por el partido de Carod Rovira sólo ondea la senyera catalana
El artículo 4 de la Constitución señala que «la bandera española ondee en cada edificio de la Administración estatal, autonómica y local es una obligación de carácter diario». Sin embargo, ERC se salta la Ley a la torera. En las consejerías que el gobierno catalán ha dejado en manos de Esquerra, la enseña constitucional brilla por su ausencia. Tres cuartos de lo mismo sucede en el ayuntamiento de Gràcia, también comandado por la formación. Mientras en Barcelona lucen las enseñas de la ciudad, de la comunidad y la española, ERC hace desaparecer la última allí donde «manda».
Montse Espanyol
Barcelona- «La obligación de que la bandera española ondee en cada edificio de la administración estatal, autonómica y local es una obligación de carácter diario». Esto dice el artículo 4 de la Constitución, aunque el 11 de septiembre con motivo de la Diada Nacional de Cataluña las instituciones catalanas hacen ver como si las leyes españolas no fuesen con ellas. Un día es un día, y son muchos los que entienden que en la Diada ni la bandera española ni la bandera local deben hacer sombra a la protagonista del día: la «senyera». Pero ¿qué pasa con los otros 364 días del año? En muchas instituciones catalanas la bandera española brilla por su ausencia y sólo se tiene ojos para la «senyera». Este es el caso de las consejerías que el Gobierno catalán ha dejado en manos de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC). A excepción del Departamento de Educación, dónde hay tres mástiles desnudos, en las consejerías comandadas por ERC no hay rastro de la bandera española. Bienestar Social, que tiene sus instalaciones en el Palau de Mar y comparte edificio con el Museo de Historia de Cataluña, sólo tiene una bandera que ondea solitaria en el tejado, la «senyera». En Turismo, Indústria i Comerç, que comparte la sede del Palau Robert con la consejería socialista de Trabajo, también ondea sin que nadie le haga sombra la enseña catalana. En Governació sucede tres cuartos de lo mismo. En Barcelona las instituciones públicas son más disciplinadas. En todas las sedes de distrito lucen las tres banderas por igual: la de Barcelona, la catalana y la española. Aunque como suele pasar, siempre hay una excepción que confirme la regla. En este caso, la Vila de Gràcia es quien pone acento dónde no lo hay. En este distrito donde gobierna ERC ondean mano a mano la «senyera» y la bandera de Gràcia. Precisamente, Gràcia fue uno de los ayuntamientos de distrito donde el «Onze de Setembre» no ondeó la bandera española. Los ayuntamientos de Les Corts, el Eixample y Sarriá-Sant Gervasi, donde el concejal de CiU, Jaume Ciurana, lleva las riendas se apuntaron a la movidaPor contra, en Capitanía y en la Comisaría de la Jefatura Superior de la Policía Nacional sólo ondea la enseña española. Al Gobierno de Zapatero no le gustó que el 11 de septiembre, con motivo de la Diada, el 92 por ciento de los ayuntamientos catalanes se negasen a que la rojigualda ondease en ellos. ZP señaló que igual que en Madrid se respetó el acto de homenaje a la «senyera», en Cataluña debería ser recíproco. Además, la ausencia de la bandera española en edificios de la Administración vulnera la Ley. Aunque, como el Col·lectiu 1714, algunos creen que «el artículo 4 es una ley injusta porque nos impide utilizar libremente nuestra bandera la catalana» . Este colectivo es el impulsor de la campaña «Un país, una bandera» que desde hace una década promueve que los consistorios catalanes sólo ondee la «senyera».
www.larazon.es
El artículo 4 de la Constitución señala que «la bandera española ondee en cada edificio de la Administración estatal, autonómica y local es una obligación de carácter diario». Sin embargo, ERC se salta la Ley a la torera. En las consejerías que el gobierno catalán ha dejado en manos de Esquerra, la enseña constitucional brilla por su ausencia. Tres cuartos de lo mismo sucede en el ayuntamiento de Gràcia, también comandado por la formación. Mientras en Barcelona lucen las enseñas de la ciudad, de la comunidad y la española, ERC hace desaparecer la última allí donde «manda».
Montse Espanyol
Barcelona- «La obligación de que la bandera española ondee en cada edificio de la administración estatal, autonómica y local es una obligación de carácter diario». Esto dice el artículo 4 de la Constitución, aunque el 11 de septiembre con motivo de la Diada Nacional de Cataluña las instituciones catalanas hacen ver como si las leyes españolas no fuesen con ellas. Un día es un día, y son muchos los que entienden que en la Diada ni la bandera española ni la bandera local deben hacer sombra a la protagonista del día: la «senyera». Pero ¿qué pasa con los otros 364 días del año? En muchas instituciones catalanas la bandera española brilla por su ausencia y sólo se tiene ojos para la «senyera». Este es el caso de las consejerías que el Gobierno catalán ha dejado en manos de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC). A excepción del Departamento de Educación, dónde hay tres mástiles desnudos, en las consejerías comandadas por ERC no hay rastro de la bandera española. Bienestar Social, que tiene sus instalaciones en el Palau de Mar y comparte edificio con el Museo de Historia de Cataluña, sólo tiene una bandera que ondea solitaria en el tejado, la «senyera». En Turismo, Indústria i Comerç, que comparte la sede del Palau Robert con la consejería socialista de Trabajo, también ondea sin que nadie le haga sombra la enseña catalana. En Governació sucede tres cuartos de lo mismo. En Barcelona las instituciones públicas son más disciplinadas. En todas las sedes de distrito lucen las tres banderas por igual: la de Barcelona, la catalana y la española. Aunque como suele pasar, siempre hay una excepción que confirme la regla. En este caso, la Vila de Gràcia es quien pone acento dónde no lo hay. En este distrito donde gobierna ERC ondean mano a mano la «senyera» y la bandera de Gràcia. Precisamente, Gràcia fue uno de los ayuntamientos de distrito donde el «Onze de Setembre» no ondeó la bandera española. Los ayuntamientos de Les Corts, el Eixample y Sarriá-Sant Gervasi, donde el concejal de CiU, Jaume Ciurana, lleva las riendas se apuntaron a la movidaPor contra, en Capitanía y en la Comisaría de la Jefatura Superior de la Policía Nacional sólo ondea la enseña española. Al Gobierno de Zapatero no le gustó que el 11 de septiembre, con motivo de la Diada, el 92 por ciento de los ayuntamientos catalanes se negasen a que la rojigualda ondease en ellos. ZP señaló que igual que en Madrid se respetó el acto de homenaje a la «senyera», en Cataluña debería ser recíproco. Además, la ausencia de la bandera española en edificios de la Administración vulnera la Ley. Aunque, como el Col·lectiu 1714, algunos creen que «el artículo 4 es una ley injusta porque nos impide utilizar libremente nuestra bandera la catalana» . Este colectivo es el impulsor de la campaña «Un país, una bandera» que desde hace una década promueve que los consistorios catalanes sólo ondee la «senyera».
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